La ansiedad es un trastorno común en la sociedad actual, y muchos de nosotros podemos sentirnos abrumados y desesperados cuando nos encontramos atrapados en sus garras. Si bien hay muchas formas de tratar la ansiedad, una técnica que ha ganado popularidad en los últimos años es la auto-compasión.
La auto-compasión se refiere a la capacidad de tratarnos a nosotros mismos con amabilidad, empatía y comprensión en momentos de sufrimiento o dificultad. A diferencia de la autocrítica, que puede aumentar la ansiedad y la depresión, la auto-compasión puede ayudarnos a reducir el estrés y a lidiar con la ansiedad.
Entonces, ¿cómo puede la auto-compasión reducir la ansiedad? Aquí hay algunas formas en que puede funcionar:
La auto-compasión reduce la autocrítica
Cuando nos sentimos ansiosos, a menudo tendemos a ser críticos con nosotros mismos. Podemos decirnos a nosotros mismos que no somos lo suficientemente buenos, que no podemos manejar la situación, o que deberíamos haber hecho algo de manera diferente. Sin embargo, esto solo aumenta la ansiedad y la autocrítica.
La auto-compasión nos permite ser amables y comprensivos con nosotros mismos en lugar de ser críticos. Esto reduce la autocrítica y nos permite sentirnos más seguros y confiados.
La auto-compasión nos ayuda a aceptar la incertidumbre
La ansiedad a menudo se relaciona con la sensación de no tener control sobre una situación. La auto-compasión nos ayuda a aceptar la incertidumbre en lugar de luchar contra ella. Nos permite ver que es normal sentirse ansioso en momentos de incertidumbre y nos ayuda a lidiar con esos sentimientos de manera más efectiva.
La auto-compasión nos permite ser más pacientes con nosotros mismos
A menudo, cuando estamos ansiosos, queremos que la ansiedad desaparezca de inmediato. Sin embargo, esto no siempre es posible. La auto-compasión nos permite ser más pacientes con nosotros mismos y aceptar que a veces la ansiedad puede llevar tiempo para desaparecer.
En resumen, la auto-compasión es una técnica poderosa para reducir la ansiedad. Al tratarnos con amabilidad, empatía y comprensión, podemos reducir la autocrítica, aceptar la incertidumbre y ser más pacientes con nosotros mismos. Si te encuentras luchando con la ansiedad, intenta practicar la auto-compasión y observa cómo puede ayudarte a sentirte mejor.


