¿Te cuesta mantener la atención en tus tareas? ¿Te distraes fácilmente con el ruido, las redes sociales o tus propios pensamientos? Si es así, quizás te interese saber cómo la meditación puede ayudar a mejorar la concentración.
La meditación es una práctica milenaria que consiste en enfocar la mente en un objeto, una sensación, una palabra o la respiración. Al hacerlo, se logra calmar el flujo de pensamientos y emociones que nos agobian y nos desconectan del presente.
Numerosos estudios científicos han demostrado que la meditación tiene beneficios para la salud física y mental, entre ellos, el aumento de la capacidad de concentración. Esto se debe a que la meditación fortalece el córtex prefrontal, la zona del cerebro encargada de regular la atención, la memoria y el autocontrol.
Además, la meditación reduce el estrés, la ansiedad y la depresión, que son factores que afectan negativamente a nuestra capacidad de enfocarnos. Al meditar, se liberan hormonas como la serotonina y la endorfina, que nos hacen sentir más felices y relajados.
¿Cómo empezar a meditar? Lo primero es elegir un lugar tranquilo y cómodo, donde no te molesten ni te interrumpan. Puedes sentarte en una silla, en el suelo o en una almohada, siempre que mantengas la espalda recta y los hombros relajados.
Luego, puedes escoger el tipo de meditación que más te guste o se adapte a ti. Hay muchas opciones: meditación guiada, con música, con mantras, con visualizaciones, etc. Lo importante es que encuentres una forma de centrar tu atención y dejar ir los pensamientos que te distraen.
Empieza con sesiones cortas, de 5 o 10 minutos al día, e incrementa el tiempo gradualmente. No te frustres si al principio te cuesta mantener la concentración. Es normal que la mente se divague y se pierda. Lo importante es darte cuenta y volver al foco de tu meditación.
Con la práctica constante, verás cómo tu capacidad de concentración mejora notablemente. No solo podrás realizar tus tareas con más eficiencia y rapidez, sino que también disfrutarás más del momento presente y de todo lo que te rodea.


