La autoestima es la valoración que tenemos de nosotros mismos, de nuestras capacidades, cualidades y defectos. Una autoestima saludable nos permite aceptarnos tal como somos, sin negar nuestras limitaciones ni exagerar nuestras virtudes. La autenticidad es la capacidad de ser fieles a nuestra propia personalidad, de expresar nuestros pensamientos y sentimientos con sinceridad y coherencia. Ser auténticos nos ayuda a fortalecer nuestra autoestima, ya que nos permite reconocer nuestro valor y respetar nuestra individualidad.
La terapia racional emotiva conductual (TREC) es un tipo de psicoterapia que se basa en el principio de que no son las situaciones las que nos afectan emocionalmente, sino las creencias que tenemos sobre ellas. La TREC nos enseña a identificar y modificar las creencias irracionales que nos generan emociones negativas y nos impiden ser auténticos. Al cambiar estas creencias por otras más racionales y adaptativas, podemos mejorar nuestra autoestima y nuestra calidad de vida.
Algunas de las creencias irracionales que pueden dañar nuestra autoestima y nuestra autenticidad son:
– Debo ser perfecto y complacer a todo el mundo para ser aceptado y querido.
– Soy un fracaso si no logro lo que me propongo o si cometo algún error.
– No soy lo suficientemente bueno, inteligente, atractivo, etc. para conseguir lo que quiero o para relacionarme con los demás.
– No puedo cambiar ni mejorar, soy así y no hay nada que hacer al respecto.
– No tengo control sobre mi vida ni sobre lo que me pasa.
Estas creencias nos llevan a tener una imagen distorsionada de nosotros mismos, a sentirnos inferiores, culpables o indignos, y a actuar de forma insegura, dependiente o sumisa. También nos impiden expresar nuestra verdadera opinión o sentimiento por miedo al rechazo o al conflicto.
Para fortalecer nuestra autoestima a través de la autenticidad con la TREC, podemos seguir estos pasos:
– Identificar la situación que nos genera malestar emocional y la emoción que sentimos (por ejemplo: me siento triste porque mi pareja me ha dejado).
– Detectar la creencia irracional que está detrás de esa emoción (por ejemplo: nadie me va a querer nunca más porque soy un desastre).
– Cuestionar la validez y la utilidad de esa creencia con preguntas como: ¿Qué evidencia tengo para sostener esa creencia? ¿Qué consecuencias tiene para mí creer eso? ¿Qué alternativas más racionales y positivas existen?
– Reemplazar la creencia irracional por otra más racional y adaptativa (por ejemplo: aunque me duela la ruptura, eso no significa que no pueda volver a encontrar el amor ni que sea un desastre; tengo muchas cualidades y defectos como cualquier persona y puedo aprender de esta experiencia).
– Practicar la nueva creencia con acciones que la refuercen y que nos permitan ser más auténticos (por ejemplo: cuidar de mí mismo, buscar apoyo en mis amigos o familiares, hacer actividades que me gusten y me hagan sentir bien, expresar mis emociones de forma asertiva).
Al fortalecer nuestra autoestima a través de la autenticidad con la TREC, podemos lograr una mayor satisfacción personal y una mejor relación con nosotros mismos y con los demás. Ser auténticos no significa ser egoístas ni irrespetuosos, sino ser honestos y coherentes con nuestra esencia. Así podremos vivir una vida más plena y feliz.


